Introducción
La sociedad humana es una
formación compleja, nace de la interacción de los hombres y la naturaleza, por
tanto, la actividad y las múltiples relaciones del hombre constituyen aquel
aspecto de la realidad del que se parte para conocer la sociedad. En el
intercambio hombre – sociedad, los procesos culturales derivados del desarrollo
económico y socio – político, preparan a todos los hombres y mujeres, tengan o
no necesidades educativas especiales (NEE) para que participen en la vida
social y enfrenten la solución de las exigencias de su realidad concreta.
Castro, M. (2019) define
el desarrollo local como:
Un proceso endógeno, que
surge de la propia comunidad, no de manera aislada, más bien implica
articulaciones colectivas para movilizar los recursos disponibles en torno de
un bien común colectivo, con la participación de todos los actores involucrados
para el desarrollo local se necesitan de todas las fuerzas de la comunidad y en
particular de la participación de las personas que en ella habitan sin
distinción y en igualdad de oportunidades. (p.2)
Esto implica, según
Fernández (2023), protagonismo de los actores sociales, más allá de documentos
o metas que se fijan lo que permite, entender la importancia y necesidad de la
integración social y cooperación entre todos, para lograrlo. Analizado así debe ser visto como un proceso
de configuración de actores sociales, como una construcción de ideas colectivas
y la posibilidad de llevarlas a la práctica.
Es así que en las localidades
habitan un grupo importante de ciudadanos que pueden aportar a este desarrollo
local, como las personas en situación de discapacidad. En el plan de estudio de
las personas con discapacidad intelectual, se pondera la formación profesional
como proceso que favorece la transmisión y adquisición de valores, normas,
conocimientos, habilidades, procedimientos y estrategias, que se necesitan para
analizar, comprender y dar solución a los problemas de la práctica social.
Esta formación laboral se
fundamenta en el principio estudio-trabajo y tiene dos objetivos fundamentales,
uno formativo con el fin de desarrollar una conciencia de productor de bienes
sociales y mediante la práctica laboral, entren en contacto directo con la
realidad que lo circunda, y otro objetivo económico con el propósito de
integrar a la producción y al trabajo social la fuerza laboral de las personas
con discapacidad, de forma que sin descuidar los estudios, contribuyan con su
esfuerzo a la creación de bienes materiales y de consumo. Ambos objetivos no se
dan aisladamente, se complementan en una unidad dialéctica: la persona con
discapacidad, al sentirse productor, conoce el valor de su aporte y al saberse
dueño de lo creado junto con toda la sociedad, adquiere mayor responsabilidad ante
el trabajo y acrecienta su sentido del deber.
Desde esta perspectiva es
esencial en este proceso la organización de las diferentes influencias que
interactúan en el proceso de atención educativas con estos educandos; escuela,
comunidad, centros de producción o servicios y la familia, que se encarga de
conjunto y en estrecha coordinación con la institución educativa, de brindar
los apoyos necesarios para obtener logros positivos en sus hijos y en ella
prevalece la relación afectiva; está la familia, como eslabón fundamental donde
se socializan los conocimientos, alegrías, emociones y tristezas de los mejores
y peores momentos de la vida de sus hijos y debe aconsejar o sugerir como
actuar cuando se encuentran conflictos y la búsqueda de la mejor opción para
resolverlos.
En el mundo contemporáneo
existen problemas tanto sociales como económicos que pueden engendrar grandes
dificultades en la vida de la persona con discapacidad. La familia debe jugar
un papel importante y decisivo para no afectar la conducta y la personalidad de
los mismos. Arés (2022) define la familia como: “la
unión de personas con un proyecto de vida común, relaciones de reciprocidad,
apoyo, amor, solidaridad y con la función de brindar seguridad y satisfacer las
necesidades psicológicas básicas desde la niñez”.
Se introduce el análisis
de un elemento crucial para el trabajo con las personas con discapacidad
intelectual básico para el apoyo al empleo; la relación de la familia y la
sociedad, en el sector privado de la economía emergente en Cuba y es un desafío
para lograr un entorno protector para todos, inclusivo y de oportunidades para
las personas con discapacidad intelectual. La familia de las personas con
discapacidad intelectual, tienen entre sus funciones, propiciarles la inclusión
familiar, comunitaria y social, su educación inclusiva, así como apoyar el
desarrollo de una incorporación laboral que garantice un progreso armónico de
las tareas a realizar para obtener la calidad óptima en el proceso de formación
y preparación laboral. En el logro de tal propósito la escuela, la familia y la
comunidad, tienen la responsabilidad de apoyar el proceso de incorporación
laboral actuando como triángulo interactivo para lograr permanencia y
estabilidad en dicho proceso. Por lo que se propone como objetivo demostrar con
acciones que la incorporación de los educandos con discapacidad intelectual, es
efectiva, cuando existe correspondencia entre la labor docente y la familia.
Materiales y métodos
Durante el desarrollo de
la investigación se utilizaron distintos métodos investigativos y el enfoque
dialéctico materialista que posibilita apreciar los fenómenos estudiados en su
objetividad, reveló las relaciones internas del fenómeno, así como utilizar con
eficiencia los métodos e instrumentos para el estudio del objeto de estudiado.
En el nivel teórico los métodos empleados tienen como objetivo posibilitar la
interpretación conceptual de los datos empíricos y utilizarlos en la
construcción y desarrollo de las teorías al explicar los hechos y profundizar
en las relaciones esenciales de los procesos no observables. El
analítico-sintético para establecer generalizaciones, elaborar juicios y
valoraciones a partir del estudio bibliográfico de discapacidad intelectual, la
orientación familiar e incorporación laboral, así como el análisis e
interpretación de los resultados obtenidos con la aplicación de los
instrumentos. El método histórico-lógico, se empleó para el estudio de la
evolución histórica del objeto, las transformaciones en su devenir y las
tendencias de su desarrollo a través de diferentes fuentes bibliográficas. El
método inductivo-deductivo para realizar el análisis teórico y empírico del
problema, permitiendo establecer los criterios más convenientes para el logro
de la elaboración de conclusiones generales.
Los métodos empíricos
empleados tienen como objetivo proporcionar los datos empíricos para el
desarrollo de las teorías científicas y constituir la vía para constatar los
hechos científicos. Además, permite arribar a conclusiones inductivas y
posibilita poner a prueba la veracidad de las teorías científicas. La
observación para constatar los modos de actuación de las familias y a los
educandos con discapacidad intelectual. En cuanto a la observación a educandos
se realiza para comprobar el modo de proceder de los insertados en los centros
de producción y/o servicios: disciplina laboral (horario de trabajo, ropa
adecuada, permanencia en su puesto de trabajo, asistencia y puntualidad,
participación en actividades) y a la familia para observar el cumplimiento y
seguimiento del proceso de incorporación laboral de sus hijos (visitas a los
centros, uso de ropa adecuada, concientización de las habilidades reales de sus
hijos, comunicación con la escuela y tutores asignados, así como el
conocimiento que tienen acerca del proceso de incorporación laboral). El método
de análisis documental que se utilizó en el estudio de resoluciones,
documentos, programa de empleo a la persona con discapacidad para determinar
las características del proceso de incorporación laboral. El grupo de estudio está
compuesto por 35 familias (representantes legales) y 35 educandos con
discapacidad intelectual de 15 años, insertados en los centros de producción
y/o servicios.
Resultados y discusiones
Como resultado de la investigación y con la
aplicación de los instrumentos, a las familias y los educandos involucrados,
llegamos a desarrollar un grupo de acciones que podrían ponerse en práctica en
otras instituciones educativas con características parecidas a la nuestra,
estas parten
del diagnóstico y se desarrollan en correspondencia con las necesidades del
grupo de estudio y se encuentran divididas en tres categorías con acciones
específicas para y sus respectivos procedimientos dirigidos a educandos y
familias. Cuentan con un objetivo general dirigido a favorecer la incorporación laboral efectiva de
los educandos con discapacidad intelectual, la preparación y apoyo entre los
docentes y las familias. Estas acciones van más allá de la reunión informal y se enmarcan en
una planificación estratégica, estructurada e intencionada.
Categoría 1: Acciones Centradas
en la Planificación de educandos y sus familias.
1. Elaboración colaborativa
del plan de acciones para educandos y sus familias en su transición a la vida adulta
Realizar sesiones de trabajo trimestrales o
semestrales, denominadas "Comités de planificación". En estas
sesiones, participan el docente, el educando y su familia.
Procedimiento: Se utiliza un
facilitador (puede ser el docente) que guía la conversación. La familia aporta
información crucial sobre las fortalezas, intereses, rutinas y apoyos que
funcionan en casa. El equipo escolar aporta los objetivos pedagógicos y las
estrategias de enseñanza. Juntos, definen metas a corto, mediano y largo plazo,
por ejemplo: "Al final del curso, el educando será capaz de seguir una
secuencia de 3 pasos para organizar material de oficina, con apoyo visual tanto
en el aula como en el hogar".
- Diseño de un "Sistema de comunicación estructurado":
- Implementar
una "Agenda de comunicación". Puede ser una carpeta física con
secciones específicas o una plataforma digital segura (como un grupo de
gestión escolar-WhatsApp).
Procedimiento: La agenda incluye
secciones como:
"Logro de la semana": El docente registra
un éxito concreto del educando en el taller pre-laboral.
"Para practicar en casa": La familia recibe
indicaciones específicas, por ejemplo: "Esta semana estamos trabajando en
saludar al llegar. Le pediríamos que refuerce este saludo cuando llegue a
casa".
"Observaciones de la familia": La familia puede
escribir: "Notamos que está muy interesado en ayudar a su papá a limpiar
el pequeño jardín de entrada a la casa”. ¿Podría aprovecharse este interés en
el aula?".
Categoría 2: Acciones
centradas en la capacitación
- Talleres
de "Formación de formadores" para familias:
- La
escuela organiza talleres prácticos, no solo informativos y teóricos,
sobre habilidades específicas requeridas en el entorno laboral, como el
cumplimiento de la disciplina en la entrada y salida del centro,
cumplimiento de los deberes.
Procedimiento: Ejemplo: Un
"Taller de enseñanza de tareas mediante encadenamiento hacia atrás".
Un docente especializado modela cómo enseñar una tarea compleja (ej empaquetar un producto) desglosándola en pasos y
enseñando el último paso primero. Luego, las familias practican la técnica con
materiales reales.
- Jornadas
de "Participación familiar" en los entornos de aprendizaje:
- Invitar
a los familiares a participar durante unas horas, una mañana completa o
tarde, en los talleres laborales o aulas donde se encuentra el educando
desarrollando la activuidad laboral.
Procedimiento: El familiar no solo
observa, sino que realiza la actividad junto a su hijo, guiado por el docente.
Esto permite que la familia comprenda los desafíos y los apoyos que son
efectivos. Por ejemplo, un padre aprende a usar un panel de comunicación con
pictogramas para que el educando pueda pedir materiales durante una práctica de
jardinería.
Categoría 3: Acciones
centradas en la generalización de habilidades a contextos
- Diseño
de "Rutinas hogar-escuela-comunidad":
- Crear,
de manera coordinada, rutinas idénticas para habilidades esenciales que se
practican en ambos contextos, por ejemplo, levantarse todos los días a la
misma hora para preparase y salir de la casa.
Procedimiento: Si en la escuela se
enseña al educando a usar una lista de chequeo visual para preparar su mochila
de trabajo (delantal, herramientas, agua), la familia implementa la lista
de chequeo para preparar la mochila para ir al mercado.
- Proyectos
de "Aprendizaje-servicio" con participación familiar:
- Desarrollar
un microemprendimiento social (ej. venta de plantas ornamentales
cultivadas en el taller de jardinería) donde las familias tengan roles
asignados, junto a los educandos.
Procedimiento: Las familias ayudan
en la logística (conseguir materiales, plantas, macetas), participan en el
punto de venta en una feria local junto a los educandos y los docentes. El educando
con discapacidad intelectual aplica sus habilidades en un contexto real, con
los apoyos naturales de su familia y la institución educativa.
Después de aplicada
las acciones derivadas de los métodos utilizados se señalan como logros: la familia
adquiere información práctica, no solo informativas y teóricas, sobre
habilidades específicas requeridas en el entorno laboral, aporta información
crucial sobre las fortalezas, intereses, rutinas y apoyos que funcionan en casa,
apoya la disciplina laboral de sus hijos en el desarrollo de las habilidades en
los centros, cambios en los modos de actuación para la práctica cotidiana. Los
educandos lograron mantener una adecuada disciplina laboral, asistencia y
puntualidad, desarrollo de habilidades en el trabajo realizado, adquirieron
rutinas en sus modos de actuación. Para favorecer un mejor nivel de vida, se deben eliminar las barreras
que imposibilitan su participación en las comunidades, recibir una enseñanza de
calidad, conseguir un trabajo decente y lograr aceptación de sus demandas (OMS, 2021) citado por Paz (2021), p.16
La historia de la atención a personas con
discapacidad intelectual, su aceptación social, la comprensión acerca de sus
posibilidades de desarrollo, ha transitado desde concepciones más pesimistas
hasta los puntos de vistas actuales. El marco histórico de la atención a
personas con discapacidad intelectual ha transitado desde posiciones
extremadamente discriminatorias, hasta llegar a tendencias más humanistas, que
permitieron centrar la atención en su integración social, privilegiando acciones
educativas que brinden una preparación integral.
Los estudios realizados sobre la atención
educativa a las personas con discapacidad intelectual,
han evolucionado desde el término retraso mental hasta la discapacidad
intelectual, dirigidos a diferentes problemáticas desde el diagnóstico, la
preparación para la vida y los procesos psicológicos para los aprendizajes
académicos, hasta los modos de actuación social, por solo citar un ejemplo, que
favorecen la búsqueda de alternativas sobre la atención educativa que se
brinda, en cualquier contexto en que se encuentren con la finalidad de
integrarlos a la vida social.
Según el criterio de Herrera (2014),
Poseen diferentes áreas de desarrollo en lo
social, establecen adecuadas relaciones de empatía, aunque estas no están
sustentadas en criterios valorativos y racionales. Son solidarios y
compartidores. Son afectuosos y amables. Les gusta jugar con otros y más
adelante realizar las actividades educativas en grupos. Prefieren estar
acompañados y les gusta ser centro de atención. Son perseverantes y laboriosos.
Participan en todo tipo de actividad social, siempre que se les permita, sin
que aparezcan rasgos de miedo escénico ni temor al ridículo, lo que pareciera
no existir para ellos. Tienen preferencia por actividades deportivas, de
manualidades y socio culturales, destacándose en este grupo la música y la
danza. Cuando son adultos son capaces de trabajar y mantener unas buenas
relaciones sociales y contribuir a la sociedad. (p 70)
Las investigadoras Leyva, M y Barreda, M.
(2017) sistematizan lo planteado por la AAID 2011, e intentan generalizar lo
abordado por estos investigadores sobre la discapacidad intelectual, al
plantear una definición que expresa:
Una condición relativamente estable del
desarrollo que se caracteriza por limitaciones significativas y de diferentes
grados en la actividad intelectual y en la adquisición de los aprendizajes
conceptuales, prácticos y sociales revelados en los modos de actuación social,
de acuerdo con las interacciones con los factores contextuales, por lo que se
caracteriza por la variabilidad y diferencias de expresión en el
funcionamiento. Requieren apoyos de diversa intensidad a lo largo de la vida.
Surge antes de los 18 años. (p. 43)
Los autores consultados que han investigado la temática aportan elementos
que son muestra de los logros que la comunidad científica cubana ha alcanzado
en la fundamentación de una concepción teórico-metodológica sobre la atención
integral a los educandos con discapacidad intelectual. Coinciden en la no comprensión de sus propios procesos cognitivos
al reflexionar sobre qué hacen bien o mal, por qué y dónde está el error. Además,
presentan dificultades para el logro de aprendizajes prácticos y sociales
relacionados con el uso de servicios y recursos de la comunidad. En el afán de educarlos en
cualquier medio en que se encuentren, exige del perfeccionamiento del contexto
familiar, comunitario o local preparado para enfrentar este gran reto.
En la concepción teórico-metodológica para las
personas en condición de discapacidad intelectual del Ministerio de Educación
presentado por el Tercer perfeccionamiento de la Educación, está diseñado el
proceso de preparación laboral dentro del conjunto de influencias educativas,
que forman parte de la formación desde la edad temprana hasta que adquieren las
habilidades necesarias para desempeñar un empleo. Es el proceso principal del
desarrollo de estas personas dirigida a resolver de forma orientada, tareas
encaminadas al desarrollo de la actividad mental y a la educación de cualidades
positivas de la personalidad. Uno de los objetivos fundamentales es prepararlos
para la vida, y posteriormente para un trabajo lo más autónomo e independiente
posible. La preparación de estos educandos para la vida adulta, independiente y
cotidiana en el trabajo y para el trabajo, está caracterizada por el cumplimiento
de diferentes etapas, lo que garantiza la formación profesional de estos y el
desarrollo integral de la personalidad. Estas etapas son:
1-.Etapa propedéutica o
de trabajo manual: (De 1ro a 6to grado) Tareas principales: Mejorar el
funcionamiento sensorial la esfera motriz, desarrollar hábitos y habilidades
prácticos de trabajo con diferentes materiales, enseñar a utilizar los
conocimientos generales en las actividades laborales, formar hábitos simples de
trabajo en talleres docentes, desarrollar habilidades, capacidades, destrezas y
motivaciones profesionales. Por las tareas que se desarrollan durante esta
etapa se considera una de las principales de formación profesional, ya que en
ella se crean las condiciones previas las premisas indispensables para
transitar por la segunda. En esta etapa ocurre además la orientación
profesional o pre - vocacional: (de 5to a 6to grado) Tareas principales:
Permite que se organicen los talleres docentes en la escuela. El objetivo
fundamental es la familiarización y el desarrollo de sentimientos de amor al
trabajo y respeto por los trabajadores, conocer la importancia de este como
fuente de bienes o servicios a la sociedad, desarrollar habilidades que los
preparen para desarrollar el aprendizaje de un oficio en dependencia de lo que
le oferta el departamento de trabajo del municipio.
2- Etapa prelaboral de
preparación profesional o formación profesional (de 7mo a 9no Grado): Tareas
principales: Se realiza en los talleres de la comunidad donde se establecen
convenios desde quinto grado (en particular a aquella persona con discapacidad
que tienen 15 años de edad) en los centros de producción y servicios como parte
del desarrollo de habilidades laborales. En esta etapa las personas con
discapacidad intelectual comienzan su formación para insertarse en los centros
laborales donde deben desarrollar un conjunto de habilidades de convivencia y
de relaciones sociales que la escuela no puede dejar de incluir entre los
objetivos a alcanzar en la misma.
3- Etapa laboral en esta etapa ocurre la inserción
laboral propiamente dicha, se trabaja en los centros de producción y servicios
de la localidad a tiempo completo.
Las personas con discapacidad se incluyen entre
los segmentos de la población a los cuales el Estado prioriza para la
incorporación al empleo. La integración socio laboral de estas personas y las
experiencias que adquieren, tienen una amplia repercusión en la vida de ellos y
sus familias. La escuela proporciona información de manera intencional y
planificada, desarrolla habilidades y capacidades con un objetivo determinado.
La comunidad es por excelencia el medio en el cual se manifiestan y aplican los
saberes aprendidos en el proceso de interacción social.
De forma general y abarcadora el presidente
de los Consejos de Estado y de ministros Dr.
C. Miguel Díaz-Canel Bermúdez
(2021) sostiene que:
El desarrollo local, constituye un programa
nacional en Cuba, cuyo objetivo es contribuir a la instrumentación de la
descentralización en el
país y al fortalecimiento de
la teoría y
la práctica del
desarrollo local como complemento de
las políticas centrales,
todo lo cual
debe demandar procesos
de gestión del conocimiento e innovación
con visiones intersectoriales, transdisciplinarias, que favorezcan la producción, difusión
y uso del conocimiento, ajustado
a las necesidades
locales propias de
esos ámbitos. Finalmente, afirma que es imprescindible
movilizar la creatividad territorial asociada al “conocimiento situado. (p. 65)
Castro (2019) planteó que:
En la contribución al desarrollo local, lo
más impactante en la participación de los educandos con discapacidad
intelectual y verlo de esta manera contribuiría a definir la orientación a las
familias desde la visión de que es necesario en este mundo global ofrecer
respuestas locales de desarrollo humano. (p.25)
Para orientar a las familias se debe tener en
cuenta las necesidades de los educandos que son: sentirse respetados, ser
escuchados, sentir de cerca la ayuda, establecer una relación empática con el
orientador, percibir que se confíe en ellos, que se reconozcan sus aciertos,
que se compartan sus preocupaciones, sus angustias, que se les trasmitan
optimismo, que se valoren más sus virtudes que sus errores, compartir ideas, criterios
y experiencias, saber que sus desaciertos pueden rectificarse. Las familias deben
cumplir con diferentes funciones tales como: la económica, biosocial, espiritual-cultural,
educativa siendo la función educativa la primordial por el doble carácter que
cumple estableciendo la retroalimentación permanente entre la familia y los
educadores. Se deben conjugar amónicamente acciones donde los educadores
orienten, demuestren, ayuden y aconsejen a la familia para el logro eficaz del
cumplimiento de esta función. Para realizar esas acciones formativas debe
conocer bien cómo son las familias de sus educandos, qué preparación tienen,
cómo se vinculan con sus hijos, y más específicamente, cómo los educan, qué
régimen educativo han conformado, en qué condiciones viven y a partir de ahí,
ofrecerles una atención diferenciada. Las familias de los educandos también
constituyen una amplia y compleja diversidad.
Se evidencia la necesidad de que la escuela y
las familias tengan relaciones de coordinación. Es importante sensibilizar y
preparar a las familias, antes del egreso del hijo, en temas referidos a la
incorporación laboral. La preparación debe realizarse teniendo en cuenta la
relación dialéctica entre lo afectivo y lo cognitivo. De esta forma la familia
estará en mejores condiciones de ayudar a su hijo para la incorporación laboral
y para prevenir las indisciplinas laborales, las sanciones por incumplimiento,
el abandono del puesto de trabajo y del oficio. Además, estas personas con
discapacidad intelectual deben desarrollar habilidades adaptativas (comunicación,
auto cuidado, vida en el hogar, habilidades sociales, uso de la comunidad,
autodeterminación, salud y seguridad, académicas funcionales, ocio y tiempo
libre, trabajo y la familia es de vital importancia.
En el desarrollo de estas habilidades y en el
propio proceso de formación laboral se han observado familias que no están de
acuerdo con el oficio que se oferta a su hijo, creando una situación difícil
entre la persona con discapacidad y la escuela, desean que sus hijos aprendan
oficios por encima de sus posibilidades. Por ello orientar a las familias desde
la escuela antes del egreso en temas referidos a la incorporación laboral es
contribuir a la preparación de las personas con discapacidades, esto le permitirá
acceder al oficio en mejores condiciones y minimizar las indisciplinas
laborales. La incorporación laboral constituye un desafío para la Educación
Especial, la comunidad y los centros laborales donde se integrarán las personas
con discapacidad intelectual. Por tal motivo este trabajo no concluye cuando
los mismos se incorporan al trabajo, tanto él, como su familia y el centro de
trabajo que lo recibe precisa de la atención sistémica de la escuela. Su éxito
depende de la función educativa de la familia y la comunidad, como condición
para alcanzar los conocimientos que le permitan obtener y conservar un empleo
adecuado a sus condiciones personales. Es así que en el plano socioeconómico se
requiere organizar proyectos que generen recursos para acometer otras acciones
transformadoras como contenidos de la estrategia de desarrollo territorial, que
evidencien la plena participación de los ciudadanos en el proceso de mejora con
un nivel de involucramiento en la toma de decisiones representados en la agenda
local con prioridades y jerarquías directivas y sociales.
Conclusiones
La sistematización de las concepciones teóricas de
la investigación permitió identificar el nivel de desarrollo teórico y práctico
alcanzado en la familia para la incorporación laboral de los hijos con
discapacidad intelectual. Las personas con discapacidad se incluyen entre los
segmentos de la población a los cuales el Estado prioriza para la incorporación
al empleo a partir de sus potencialidades y posibilidades. Los desafíos cada
vez mayores en distintas áreas de la sociedad, implican una mirada diferente a
la participación de las personas con discapacidad intelectual lo que demanda
una preparación sobre la base de sus fortalezas y necesidades en el contexto
del desarrollo local donde su incorporación laboral es una prioridad. Las
acciones elaboradas favorecerán la disminución de las carencias que poseen las
familias sobre la incorporación laboral de sus hijos y las posibilidades reales
en la adquisición de un empleo digno como vía eficiente para su incorporación
efectiva que aporta el desarrollo local.
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